El idioma se desgasta y cada vez llenamos más nuestra mente
de adjetivos; contrario ocurre con los conceptos, los verbos o los adverbios (¿sabemos qué es un adverbio?). Me ofende que solo ya solo pueda escribirse sin tilde porque no lo considero un cambio válido.
Esta tilde contenía especial importancia para mí porque el solo (sin tilde) se
refería a un estado de soledad, algo sin compañía; mientras que sólo (con tilde)
significaba exclusividad, excepción; osea que se podía poner la tilde si se podía remplazar
por solamente o únicamente. Era el rigor bajo el cual se asimilaba el episodio diacrítico.
Pienso que debería conservarse la expresión sólo porque es evidente su elegancia y distinción, y porque la tilde
corresponde a un sentido estético y a una significación de la soledad desde el idioma que es lenguaje.