miércoles, 14 de noviembre de 2012

Sobre el cono simiesco y la servidumbre detrás de la certidumbre



Me permito creer que el fuego es domesticable porque relaciono los incendios con los bomberos, grupo de personas anónimas dispuestas a salvarme.  Pero antes, el fuego, quemaba hasta cuando no quedara nada por quemar. El panorama detrás de la neblina podría llegar a ser una ciudad ardiente, habitada por mujeres que corrían dispuestas a ahogar las llamas con el agua de las tinajas que traían sobre sus cabezas. Tales esfuerzos valientes, por las particularidades de la actualidad, también me parecen ingenuos. 
Hoy, en el siglo XXI, mero puñado de años de la eternidad, se confía en los designios de la razón sobre la cual se instituye la ciencia, principal heredera de los métodos de la mitología religiosa. El credo está relacionado con la certidumbre. Un diagnóstico médico o psicológico, la señal de la Cruz de un Papa: por sus efectos, todo me parece igual luego de mirar El Incendio de Borgo, obra de Rafael.  

martes, 6 de noviembre de 2012

Lejano @hotmail.com



Silvestre nostalgia siento por aquellos sitios web que he abandonado para sumarme al avance y sentirme eficiente, conectado de modo social y capacitado para la interacción. Cuando ingreso a ellos, después de tensar la memoria con el objetivo de recordar las contraseñas correspondientes, los encuentro oxidados, cual buzones viejos o edificios abandonados; como ruinas sentimentales donde atesoro aquellos mensajes que nunca fui capaz de eliminar porque algo mío conservan. Una vez allí, el presente se hace estridente porque todo el pasado, su raíz, parece haber sido una ilusión; como si, sin saberlo, me hubiera sumado a un denso experimento. Y esta sensación algo paranoica, antes de herirme el orgullo, me cuestiona por todo aquello que pasó y dejó de pasar con todas aquellos desconocidos que resulté distinguiendo entre los anónimos, por no saber si en alguna era los humanos avanzaremos sin dejar ruinas, y por la necesidad e importancia de éstas.
Luego, ¿qué haremos con los basureros y los cementerios? ¿Los volveremos laboratorios... carnicerías?